Cada día me enseñáis más

Siempre me he preguntado que, que hay mejor que el calor de unos padres, es una pregunta que siempre me ha echo gracia porque nunca he conseguido encontrar la respuesta. Hasta que un día te das cuenta de que como su calor no hay nada, y es que como el cariño de unos padres no hay nada en este mundo, ellos son los que nos traen al mundo, los deciden dar su vida por nosotros, estropear su juventud por ver crecer una vida a su lado, ellos elige tener que privarse de muchos lujos, teniéndonos que cuidar a nosotros, ellos eligen querernos, tenernos, y luchar por nosotros. A diario los tratamos mal, y lo último que queremos es pasar tiempo con ellos, preferimos una fiesta con los amigos, un día por ahí que estar con ellos, y nunca se nos ocurre pensar lo bien que te sientes cuando estas con su compañía, te sientes bien estas acostumbrada a ello, pero he de decirte que el cariño de los padres no es una rutina, es el que ellos quieren darno, nos lo dan porque nos quieren, porque nos trajeron al mundo, porque quieren vernos sonreír y ser felices aunque eso conlleve que ellos tengan que sufrir. Tus padres son los únicos capaces de darlo por ti, de luchar con uñas y dientes por tu felicidad, porque tu misma consigas lo que quieres, te intentan proteger de cualquier daño que te puedan hacer, te protegen hasta de la vida, te dan sus mejores consejos, y se matan a trabajar para que tu puedas comprarte una camiseta nueva, quieren verte labrar tu futuro, y no les importa nada más que asegurarse de que cuando ellos ya no estén estaremos bien. Ellos serán los únicos que no te fallen nunca, siempre te apoyarán aunque no estén de acuerdo con tu decisión, te escucharán y pondrán solución a tus problemas se matarán a pensar que pueden hacer para hacerte un poco más feliz, te dan todos tus caprichos, y siempre que te regañan lo hacen por tu bien. Ellos nos dan la vida, nosotros con nuestras incoherencias se la quitamos poco a poco, pero quiero que sepáis que a mi no me da vergüenza decir que lo mejor que tengo en esta vida son ellos, mis padres, los que me dieron la vida, y la razón por la que sigo día a día, yo los quiero como los mejores padres del mundo que son para mi.